sábado, 5 de diciembre de 2009

Assaf Farfan “Mata a ese perro pero no acaba la rabia”.

Assaf Farfan “Mata a ese perro pero no acaba la rabia”.

Salvo extrañas excepciones un boxeador no se preocupa por comprender el efecto que produce el vinculo creado entre el acto de su oficio y algun ser expectante; por su parte el púgil sale de un túnel que podría convertirse en su “milla verde” cual condenado a muerte, su recorrido esta colmado de plegarias y cargas emotivas que han de darle un plus en la confianza para afrontar su destino, que a decir verdad esto es lo único que realmente le importa. La posición del espectador es por mucho la mas cómoda en ese momento, no exigirá nada al peleador fuera de sus condiciones naturales pero es justo ahí donde se manifiesta el juez mas fiel que califica no en base al sistema estricto del deporte mas bien en una escala gradual de emociones pidiéndole a modo de ruego que haga lo que sabe hacer, eso es todo. Si diseccionamos cada articulo que integra esta dimensión la mas importante es la del púgil, este es el motor fundamental que activa al mecanismo, todo gira en torno a el y es en el donde recae el éxito o la condena. (en una entrevista con J.L. Zertuche miembro del cuerpo olímpico en Sydney 2000 rankeado alguna vez entre los mejores 5 del mundo; cuando me habla de su posible regreso a las primeras filas del boxeo rescate las siguientes líneas) tengo mi orgullo aun, mi voluntad, me cuesta llegar al peso pero eso tiene remedio, cuando un boxeador esta viviendo sus últimos días sobre el ring sube de división y el peso que tiene encima le podría ayudar y hoy me sentí muy fuerte, me llego mi segundo aire, mi ultimo aire. Si gano o pierdo lo habré intentado de eso no hay duda a pesar de que en este deporte no hay bromas ni un modo de ocultar la realidad conservo la idea utópica de irme de aquí con un campeonato del mundo. Dicen que el síntoma inequívoco de que el boxeador ya esta viejo es aquel que te hace ver que poco a poco vas perdiendo, primero las piernas, después las peleas y al final las personas que has amado, te quedas con poca gente contigo, estas solo, pero siempre he estado solo no? A mi, el boxeo me advirtió que hace tiempo, hace mucho tiempo que ya soy un viejo para esto. Se que ya no puedo recuperar muchas cosas, se me hizo tarde para eso, solo quiero subirme ahí, hacer unas peleas mas y ganar lo que nunca he tenido. Si, hay días que no quiero entrenar, que no quiero salir, no me emociona tanto ponerme los guantes dicen que mis ojos miran con mucha calma los movimientos del otro claro, cuando tengo oportunidad, que ser agresivo ya no es una cualidad mía que vengo a menos, si, también me han dicho que estoy viejo pero, soy un viejo con ganas de ganar, como un perro que ya no tiene rabia pero sigo siendo un perro a final de cuentas, un perro con mucha hambre. En palabras de Eduardo Lamazon, secretario ejecutivo del CMB “No hay mayor exaltación del individualismo que la del boxeador y del artista. Este es un condenado a no compartir nada con nadie, porque la creación solo es posible en soledad” Cierto, la creación únicamente es posible en soledad, sin embargo existen factores que el solitario podría considerar en ese momento creativo. El mismo Muhammad Ali mencionaba que su éxito no habría sido posible de no ser por cada rival en el cuadrilátero (refiriéndose a Sonny Liston, Ali citaba que, él no estaría aquí si no es por mi y yo no estaría aquí si no fuera por él) el púgil necesita compartir su soledad para afirmar su propósito. En cierto modo es inevitable asociar a la soledad como un fundamento creativo, son cómplices en el resultado que se produce, en este caso, son cómplices en el boxeo. Será así interesante mencionar que es parte de su estética. Este deporte desde hace tiempo y lentamente se ha quitado los clavos que le quedaban, los restantes en su cruz son la condena del acto salvaje que representa desmeritando las acciones del ser humano, avergonzándolo con exhibiciones animales. Seguramente sus detractores no han logrado ver en su análisis que en esta disciplina se sublima la capacidad máxima del ser, es en este modo de juzgar donde tendrán que sustentar que cualquier otro animal puede exhibir con tanto prodigio un dominio total del espacio, de su fuerza, de la percepción absoluta del riesgo de muerte en la ejecución de una contienda. No existe el bien o el mal, no se deben encontrar, no hay la necesidad de juzgarlos de esta manera si se comprende que la voluntad de un púgil en su naturaleza sobrepasa un sistema binario. Existe un acuerdo cabal que consta en asumir una supervivencia en la aniquilación del otro. Si le quitamos toda referencia formal, es precisamente, una fuerza de la naturaleza. Todos estos conceptos desmembrados para lograr un juicio ensañado o benigno no se desprenden de la naturaleza para depositarse en un catalogo con nombre; para comprender una percepción total del asunto en cuestión no se deben tratar de comprender así, pues constituyen un todo cuando esta fuerza cumple su propósito. No hay intención de incrustar el boxeo en el arte sino contemplarlo en una condición natural, una belleza natural en la contemplación sin el sistema binario que se desprende en los juicios morales. Y refiriéndome al propósito antes mencionado, este se extiende para gestionar los recursos energéticos de nuestras posibilidades y en mayor medida va en dirección donde depositamos el concepto de lo bello y sus variantes que han adquirido fuerza como una modalidad mercadotecnica que penetra en el mentado “imaginario colectivo” para generar validez y sustentar en el caso del arte, las piezas que se proclamen innovadoras. La materia a la que damos forma tiene entonces mas posibilidades dentro de esta reestructura estética donde los términos excluyentes pasaron de moda y el sistema abrió paso a cierta terminología que se adecua (de acuerdo a ciertas características) al sentido estricto del entendimiento, a los elementos intangibles de la razón borrando del mapa la vulgar dicotomía tan inútil e insuficiente. Si existieron las bellas artes inevitablemente existieron las feas artes que por un proceso implícito de eliminación ni siquiera alcanzaban tal nominación que por derecho o lógica les pertenecía, reduciendo sus expectativas equiparables a las de la carne de cañón. Sobraría decir que por temor a su destino difícilmente se concebían. Sin embargo, Siendo el tiempo su mejor aliado las feas artes pueden surgir sin discriminación alguna gracias a esta evolución, la del juicio critico; entonces lo feo ya no es feo sino interesante y aunado a esto lo bello implacablemente por el hecho de ser opositor de lo feo también fue exterminado del mundo del arte en un campo de concentración por sus limitadas capacidades. Aun así, la belleza tuvo posibilidades y resucito encarnando en el intelecto (si acaso en este termino se logro su muerte). De este modo era inevitable competir contra el termino “interesante” y su abrumador paso que gano terreno en dimensiones sensacionalcitas y tendenciosas que progresivamente se convirtió en una carta muy fuerte en el mercado por su facilidad y rapidez en el consumo de lo que divierte y paraliza con efectos hipnotizantes y consoladores. Entonces lo bello se manifestó en su forma natural no en la representación sino en el acto natural y en la razón de un ámbito intangible y difícil sino es que imposible de poseer. Los juicios y la terminología son variables en la materia, en la producción y en el arte; pero en la naturaleza nadie puede cuestionar la verdad, lo perceptible en un plano real. Lo bello se percibe en la naturaleza y en el arte se da en el intelecto a través de combinaciones genuinas que permiten solo su contemplación relegando en toda posibilidad su posesión. Se concibe a la belleza en un espasmo por sus cualidades efímeras, un momento que a decir del pugilato recae en el despliegue de todas sus posibilidades sin reservas, en una cátedra de ritmos coreográficos y el auge de emociones de aquellos jueces que conforman el total de la dimensión, explotando simultáneamente. Se contempla en esta dimensión a la belleza sin darle alguna forma especifica porque reducirla o tratar de contenerla constituye una mutilación y hace inservible a la experiencia que se disminuye en la metáfora de adquirir un paisaje al óleo representativo de fenómenos naturales. El boxeo es un ejercicio de vida que no atenta contra el misterio, se transforma en la escala de un proceso vital que permite experimentar un sabor genuino, extraño quizá, pero así seria el sabor que tiene la realidad.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Bahpe10: 1er. Foro de Estudios Visuales UGTO

Se realizara el día 4 de diciembre de 9.00 am a 12.30 pm

En el auditorio ¨Aljibe¨ del Departamento de Arquitectura de la División de Arquitectura Arte y Diseño

Programa de Acitvidades

Bah pe10

“Foro de discusión sobre arte actual”

1.- Ser humano como principio de todo. (Duración 32 min.)

Marcela Guerrero Hernández, “¿De humanos a máquinas? ¿Por qué?”.

Assaf Rafael Farfán Reyes, “Mata a ese perro pero no acaba la rabia”.

Nayelli del Carmen Vázquez Ramos, “Observación del cuerpo humano”.

Preguntas y respuestas.

2.- Arte y tecnología. (Duración 32 min.)

Abraham Martínez Villegas, “Arte como ritual”.

Miriam Celina Arias García, “¿Qué hay? ¿Qué habrá?”.

Ximena Aguilar Fernández, “La mona Lisa en un llavero”.

Preguntas y respuestas.

3.- Método de estudio visual. (Duración 32 min.)

Ariadna Rapozo Castro, “La apariencia como finalidad. Finalidad ingenua pero igual funciona”.

Roberto Barajas Vázquez, “Hallazgo y práctica de un método para la lectura de obra como: collage, ensambles y combines”.

Hassler Harlan Estrada Mata, “Objeto confortable”.

Preguntas y respuestas.

4.- Lenguaje. De lo verbal a lo visual. (Duración 40 min.)

Pedro Alberto Álvarez Martínez, “Posibilitador Conceptual”.

Beatriz del Carmen Ruíz Veloz, “La confianza a través del cartel…”

Yessica Yazmín Hernández López, “Cine, televisión y video arte”.

Edgar Martínez González, “La saturación de la imagen”.

Preguntas y respuestas.

5.- Realidades o híper realidades. (Duración 24 min.)

Luz Miryam Barbosa, “Caricatura vs realidad”.

Mariana Álvarez Rodríguez, “TV y Mentira = verdad absoluta”.

Preguntas y respuestas.

6.- Adopción del yo real y meta real. (Duración 40 min.)

Jesús Azpitarte Almaguer, “El desgaste del símbolo de la muerte, identidad, globalización y moda”.

Eric Rodrigo López Quiñones, “La voz del personaje”.

Berenice Arnold Hernández, “Yo massmedia”.

Josué Isaí Velasco Magdaleno, “Nosotros las otras”.

Preguntas y respuestas.

7.- Comunicación a través de la imagen virtual. (Duración 24 min.)

Mario Gamaliel Medel Romo, “De código a imagen”.

Edgar Fabricio González Ávila, “Lenguaje ASSCI”.

Preguntas y respuestas.



Abraham Martínez Villegas “El arte como ritual”

“El arte como ritual”

Abraham Martínez Villegas

He visto varias veces la indignación, la indiferencia e incluso la repugnancia en los espectadores que van a las galerías o algún espacio cultural en donde se presenta arte contemporáneo. Reacción seguramente justificada si hablamos de un espectador que tiene nociones vagas del término arte, pues desde pequeños es muy probable que cuando se nos explicara esta actividad humana, viniera a colación imágenes renacentistas, principalmente en pinturas y esculturas, incluso es posible que las primeras conexiones nos lleven al concepto de belleza como sinónimo de arte. Es entonces que se entra en un choque cuando estas ideas se ven trasgredidas y se niegan en imágenes que rompen con las plataformas artísticas tradicionales. Sin embargo si consideramos el avance del arte a través del tiempo, podremos notar que este se adecua a las circunstancias de una forma casi atemporal y que nos incitan a cuestionamientos sobre el conocimiento humano, mediante la sorpresa y el misterio.

Es por ello que creo conveniente iniciar este análisis, volviendo hasta las primeras obras que se consideran parte de la historia del arte, tenemos así las pinturas rupestres de las cuevas de Altamira, las cuales presentan la cotidianidad antigua envuelta en un origen misterioso.

Una de las teorías más aceptadas sobre esta obra nos llevará al concepto de magia, pues en el contexto en el que fueron creadas, podemos notar que el despertar de la primitiva mente humana empieza a surgir como una necesidad distinta a la de las fisiológicas. En estos nuevos requerimientos, la vida y el entorno natural se unían en uno sólo, por ello las imágenes de la caza son recurrentes retratos de su forma de vida, no obstante parecería algo extraño encontrar en estas etapas, objetos que no cumplan con una tarea vital y precisa, por ello actualmente intuimos que tenían una cualidad semejante a los principio del vudú, en donde la representación pictórica de los animales les haría poseerlos también en la realidad. Tan pronto como la tarea se viese exitosa, el misterio de la obra fomentaría la fe en ella y la convertía en algo más que un trazo o una mancha, sino una herramienta que reflejara el potencial humano sobre la naturaleza.

Este tipo de pensamiento es un claro ejemplo de lo que podría llamarse magia primitiva, la cual presenta un sistema alterno al pensamiento lógico, creado con la finalidad de comprender las leyes naturales y alterarlas para conseguir un resultado deseado. Es así que los rituales primitivos se fundan en una ley de semejanza en la que los efectos se aproximan a sus causas, es así que el antiguo hechicero realizaba una serie de acciones que semejarán a un efecto deseado con la fe de conseguirlo, todo esto mediante la unión de actos físicos e inmateriales. Este tipo de pensamiento dominó por mucho tiempo, debido a que las explicaciones mágicas lograban satisfacer los misterios de un mundo en donde el conocimiento, hasta ahora obtenido, no era comprobable sino maleable a una voluntad que se mantenía incorpórea. Paradójicamente, estas acciones repletas de subjetividad preceden directamente a actividades más concretas y objetivas como la ciencia, pues las raíces del concepto mágico nos llevan a un sistema para comprender la naturaleza, claro está, que la magia siempre nos llevará por un camino incomprobable y que depende de nociones metafísicas. Es así que por esta razón el pensamiento mágico fungió como el prototipo de muchas de las religiones actuales, las cuales preservaron esta facultad de crear realidades alternas que afectarán directamente en nuestras vidas. La forma más palpable de reflejarlas se tradujo en imágenes provistas principalmente por el dibujo, la pintura y la escultura, por ello que el arte sirviera como el cáliz de los dogmas y creencias religiosas que dominaron el pensamiento humano por varios siglos.

Poco a poco el arte se fue desvinculando de doctrinas masificadas, para intimarse en una propia que reflejara la vida de su creador y le hiciera palpable un refugio ante su realidad. Sin embargo nunca perdió la noción del ritual mágico, el cual necesita semejar algo para poseerlo, quizás esto explique porque las primeras obras de arte tienden a plasmar fielmente la realidad en imágenes ciertamente figurativas, y no en representaciones abstractas. El arte entonces forma parte de este plano subjetivo e incierto del comportamiento humano, pues así como un acto de magia posee la cualidad de manipular la materia para llegar a un resultado no lógico (aunque si estimulante), este recurre a la ilusión para crear resultados directamente en el psique de su espectador.

No obstante el misterio y la sorpresa indispensables en el acto artístico dejan de funcionar cuando se vuelve algo monótono y establecido. Por ello la necesidad de transgredir y mostrarse a sus espectadores con nuevas formas, para así despertar una cierta seducción que refleje un misterio sobre las intenciones del creador, la imagen artística utiliza la ilusión como recurso físico, pues engaña a los sentidos y hace que su “hechizo” se vuelva realidad, no obstante este recurso se ha tenido que replantear para no destruirse en las sociedades modernas, en donde la ciencia y la tecnología han expandido al límite nuestro contacto con las imágenes y los sonidos. La competencia de todos estos estímulos, es precisamente lo que los debilita al desensibilizarnos como espectadores. El arte debe entonces mutar a manifestación artística tales como la instalación, el video, el arte objeto, el performance, entre otras que juegan con esa ruptura esquemática del arte tradicional y bello; sus escenarios muestran una ilusión que exalta de una manera directa y/o novedosa, mediante sensaciones que ya no sólo abarque la belleza, sino también la fealdad y la repugnancia, el miedo, lo absurdo y todos los matices de las emociones humanas. Esto no implica, que las manifestaciones tradicionales como la pintura o la escultura desaparezcan, pero sí que cambien las formas en la que la imagen se muestre a través de estas.

Finalmente, pese a toda la gama de expresiones que existen, la modernidad ha puesto una barrera que obstaculiza el principio ritual del arte, ya que todas las herramientas tecnológicas que se utilizan hoy en día, son parte de una gran red de actividades humanas que las manipulan indistintamente en propósitos ajenos unos de otros, por lo que los limites entre todas estas, se encuentran camuflados entre sí. A su vez, la reacción en los espectadores se refleja en la incredulidad ante el “show” del arte, en donde la ilusión es cada día más difícil de alcanzar. Por ello se habla de una crisis, que posiblemente sea superada conforme los nuevos medios avancen y como estos sean utilizados por los futuros artistas que logren retratar la realidad de sus tiempos.

Aldonza Ximena Aguilar Fernández Mona Lisa en un llavero.

Aldonza Ximena Aguilar Fernández

Mona Lisa en un llavero.

27 de noviembre 2009.

Lo popular puede ser cualquier cosa desde las películas, televisión, radio, internet, publicidad, juguetes, arte, juegos, ropa, libros. Frecuentemente la cultura popular es vista como algo trivial o superficial, hecha para el consumo masivo y que no requiere de una “alta” educación para ser entendida. El inicio de este punto de vista puede rastrearse a los orígenes mismos de la cultura pop: el pueblo, porque como es bien sabido, en los viejos tiempos la educación era algo privilegiado, no cualquiera podía asistir a la escuela, incluso las mujeres eran vetadas de este derecho, por lo tanto la cultura estaba reservada para las aristocracias y familias acomodadas. El resto de la gente, la cual era la mayoría, tenía que conformarse con el conocimiento que la vida diaria brindaba. La cultura del pueblo no podía ser por lo tanto única o intelectualizada, lo que hizo que las clases altas miraran a ésta de manera peyorativa.

Puede que estas ideas aún sean expresadas por varios en la actualidad y no sin justificación, pues hay elementos en la cultura popular que dan para este tipo de crítica y más. Tomemos por ejemplo la producción de telenovelas en la televisión mexicana. La mayoría de ellas (si no es que su totalidad) tienen una trama básica de lo que podríamos llamar cuento de hadas: un hombre y una mujer se aman pero por azares del destino no pueden estar juntos y siempre hay un villano o varios que hará todo lo posible por perpetuar esta situación.

El fenómeno de los sesentas llamado Pop Art logró mezclar la alta cultura de los educados con la imaginería del pueblo.

Este fenómeno continúa hoy en día en un exponencial mayor gracias al desarrollo de la tecnología y las innovaciones tales como el internet. Todos los componentes del pop que ya mencioné con anterioridad (ropa, arte, música, etcétera.) encuentran en el ciberespacio un lugar para la promoción y distribución. El éxito popular y comercial parece asegurado con esta herramienta que elimina fronteras y cuyo alcance en audiencia rebasa por mucho al de la televisión, radio o periódico. La cultura del pueblo se expande a través de la red, las imágenes de cualquier índole pueden ser encontradas en este medio. La cultura popular se ha vuelto universal.

Tal es el impacto que ha tenido sobre la vida el internet que, caso curioso, incluso el arte elevado tuvo que entrar en el juego. Podemos encontrar museos como el Metropolitan o el MOMA de Nueva York haciéndose publicidad a través de las redes sociales, ofreciendo descuentos y promociones a todo tipo de público. El arte que antes estaba enclaustrado en los museos ahora vaga libremente por el ciberespacio. Cualquiera puede poseer una copia de un Monet o un Picasso de manera gratuita e instantánea. Si bien hace ya años y personajes que la idea de arte para todos fue expuesta, nunca había sido tan posible como hasta ahora. Las posibles divisiones que podrían aún haber existido entre lo que era alta cultura y cultura popular se han borrado.

El arte de hoy (en todas sus manifestaciones) sigue nutriéndose del pueblo, de sus creencias, vivencias y gustos. Es por esta razón que todo es susceptible de convertirse en pop, porque siempre habrá algo con lo que el espectador se identifique y relacione, no puede ser de otra manera si la fuente es la vida misma. Este flujo inspiracional no es sin embargo unidireccional.

Los elementos del arte elevado se cuelan cada día entre los elementos de la cultura popular, camuflajeándose, adaptándose. Se vuelven tan comunes al ojo humano que es fácil olvidar su origen o lo que representaban originalmente.

Tomemos como referente el caso de la que tal vez es la pintura más popular y famosa del mundo: la Mona Lisa o Gioconda. Esta obra del siglo XVI ganó popularidad por el supuesto misterio que la envuelve, que si se trata del mismísimo Leonardo, su sonrisa o su horizonte disparejo, la Mona Lisa ha sido fuente de inspiración para todo tipo de creadores y es que hay libros, películas, caricaturas, blogs, más obras de arte.

La interrogante aquí es, si una obra de arte de la alta cultura como lo es la Mona Lisa se denigra al ser victima de tales parodias o reinterpretaciones, porque lo mismo la encontramos en una obra de Marcel Duchamp que en un reloj de pared o un calendario situado en medio de otras ediciones de calendarios como los atardeceres más grandiosos y los cachorros más tiernos. Me parece que este es un intento por parte de algunos de acercar el arte al pueblo, de “culturizar” a las masas, pero de igual manera si la cultura popular utiliza elementos del arte elevado es porque hay una demanda de parte del pueblo por acercarse a las obras.

Las personas obtienen este tipo de productos, de gran variedad que pocas veces tiene alguna relación con el arte y sin embargo lo utilizan como medio publicitario, porque quieren sentir que son parte de este mundo elitista que a veces puede ser el arte. Las imágenes usadas así no son denigradas ni reducidas de categoría en ninguna manera, porque finalmente quien le otorga el valor a los objetos es la persona que los posee. Tal vez algunos visitantes de museos encuentren que tuvieron una experiencia mayor al ver esta reproducción en alguna parte de su casa que al ver la pieza la original y prefieren comprar el recuerdito que les otorga mayor satisfacción.

Mientras el arte elevado siga siendo tratado como un producto por la misma institución (museos, coleccionistas, etc.) no habrá mucha diferencia entre éste y el arte reinterpretado de la cultura popular, porque el arte elevado debería ser aquél que es completamente gratuito para cualquier persona.

Ariadna Rapozo Castro ”La apariencia como finalidad. Finalidad ingenua, pero igual funciona”.

Ariadna Rapozo Castro

Estudios Visuales

”La apariencia como finalidad. Finalidad ingenua, pero igual funciona”.

El análisis que manifiesto es: quizá para algunos, un método (ya adoptado); para otros, una opción; para algunos otros, algo ajeno; para mí, una manera de ayudar a los oyentes a decidir su posición.

Encontrarnos en el ambiente artístico y adoptar una posición (un rol) es algo básico y elemental, ni siquiera es necesario estar concientes de esto para encontrarnos clasificados, descritos y evidenciados.

Independientemente de localizarnos ya en el catálogo y aún mejor, saber en donde nos encontramos y hacia donde lo dirigimos (identificarnos), podemos tachar juicios externos y continuar desinteresadamente por el buen camino del arte, es decir, cualquier manifestación sincera y personal relacionada con las variadas disciplinas y ocupaciones, ESTANDO CONCIENTES que es un arduo camino, de difícil incursión, demasiada competencia y un entorno social que requiere más que nada respiros visuales (de fácil digestión).

Un empujón fácil para alcanzar el reconocimiento y después lo que desees expresar vendrá con sus respectivos espectadores. Pero cuidado porque igual funciona.

Las apariencias son el resultado de una combinación de elementos que conforman al personaje ideal en una sociedad, abarcando diversos aspectos, por ejemplo, físicos, sociales, culturales, etc. Lo más común refiriéndonos a la época y a la interacción del individuo con ella, en ella y con otros individuos, es pensar directamente en una apariencia conformada por la imagen.

Actualmente adquirir imágenes de diferentes medios es muy sencillo, simplemente inevitable. La mayoría de las actividades cotidianas emplean aparatos de emisión o recepción de imágenes. Trabajamos con la imagen. Trabajamos la imagen. Hasta el lenguaje y la comunicación son la imagen.

Después de la pequeña introducción, llega el momento de presentar interés e invocar la iniciativa.

Existen ejemplos evidentes de los que podemos observar las diferentes adaptaciones y versiones de un “sujeto aparente”, podría ser de gran ayuda un análisis extra.

La diferencia entre dicho “sujeto aparente” y nuestro oyente, es que quizá el primero ignore o, simultáneamente, le tenga sin cuidado ser producto de la imaginería ajena sin finalidad u objetivo alguno; en cambio nuestro oyente tiene compromiso consigo mismo, y para cumplirlo le proponemos llevar la apariencia al extremo. Es necesario mencionar que nuestro individuo aparente gozará de ventajas frente al entorno en el que convive, pues sus actividades y actitudes serán concientes y en beneficio del objetivo final.

Evidente que las expresiones artísticas son resultado de un contexto, social, cultural, etc. incluyendo las experiencias personales del autor. Si nuestro oyente lleva la “esencia del aparente” al extremo, entonces adquirirá experiencias que no son propias, experiencias de otros (experiencias desconocidas, de dudosa procedencia, con probabilidad de ser falsas, de no ser etc.). Entonces se redefinen las circunstancias que conforman una pieza artística.

Éxito social – situarse en un círculo – felicidad personal – aceptación , auto aceptación .

Método práctico.

El sistema en el que vivimos es, por naturaleza, defectuoso y con Mentiras continuas.

Aprovechar el defecto del ser aparente.

Todo es apariencia. ÉL que se sabe aparente tendrá ventajas.

Adopción de situaciones ajenas.

Priorizar e identificar objetivos personales.

J. Roberto Barajas V. Hacer arte hoy es una especie de combinatoria, y esta muestra parece demostrar que millones de aficionados nunca pasaremos de a

Hacer arte hoy es una especie de combinatoria, y esta muestra parece demostrar que millones de aficionados nunca pasaremos de ahí.

Presentación práctica del hallazgo de un sistema para la lectura de collage, ensambles o combines, aplicando la combinatoria. Por: J. Roberto Barajas V.

PRIMER SEGMENTO

Proyección del clip de la película: “No direction home” de Martin Scorsese. Parte 2.

De 00:00:17 a 00:01:41, 00:01:24 min

SCORSESE, Martin. No direction home Bob Dylan. Estados Unidos. Spitfire pictures. 2005. 208 min.

Secuencia inicial de la segunda parte del documental "No Direction Home" de Martin Scorsese


Busco un sitio que “recoja, corte el pelo, bañe” y me devuelva a mi perro…

“KN1-7727, cigarrillos y tabaco”

“Se venden animales y pájaros a comisión.”

Quiero un perro que me recoja y limpie el baño, me devuelva el cigarrillo, dé tabaco a mis animales y luego dé comisión a mis pájaros.

Busco a alguien que venda mi perro, recoja mi corte de pelo, compre mi animal y enderece a mi pájaro.

Busco un sitio para bañar a mi pájaro, comprar mi perro, recoger mi corte de pelo, venderme cigarrillos y dar una comisión a mi baño.

Busco un sitio que recoja mi comisión, venda mi perro, queme mi pájaro y me venda al cigarro.

Voy a pajarear mi compra, recoger mi voluntad y bañar mi comisión.

Busco un sitio que animalice mi alma, teja mi vuelta, bañe mi pie y recoja mi perro.

Comisión por vender mis animales, al pájaro por recortar y comprar mi baño…

Y hacerme volver a mis cigarrillos.

ROBERT ALLEN ZIMMERMAN

BOB DYLAN

SEGUNDO SEGMENTO

Lectura y proyección del texto “Pablo y virginia” de la autoría de Erik Satie de la selección: De la Bella Época al DADA, por Luis Gregorich.

“Virginia cantaba como una papa pequeñita y graciosa. Pablo, entonces, bailaba en un pie para no molestar los padres. A Virginia le gustaba verlo bailar. La canción de Virginia hacía llorar a los monos.”

ERIK ALFRED LESLIE SATIE (1866-1925)

GREGORICH, Luis. De la Belle Epoque a DADA antología de textos. Caracas Venezuela. Monte Ávila Editores CA.1977.

Lectura de combinaciones propuestas:

Que graciosa papa la pequeñita de virginia que canta. Pablo molesta con un pie entonces los padres bailan. A Virginia le bailaba verlo gustar. Los monos hacían canción de virginia.

Me gusta virginiar como papa para verlo llorar, los padres graciosos en un pie molestan a los monos.

¡Ya pablo!!Con virginia en un pie! Como si hicieras llorar a los monos, deja que la papa cante.

Los monos hacían llorar virginia con sus canción . Le bailaba verlo gustar a Virginia. ¡que molesto bailar en un pie Pablo!. Graciosa y pequeña como Virginia cantaba la papa.

¡Báilame papa! O Virginia entonces en un pie, Pablo ni molesta, le gusta verla bailar. ¡hacia Virginia monos!

TERCER SEGMENTO

Proyección de Collage “M”:

Titulo: M

Tamaño: 21 x 28 cm

Lectura de combinaciones propuestas:

Muy impresionado quedo Buscemi, pues al treinta y nueve se doblo Ali. Todavía grabando, me pidieron que tomara a la de verde y la codifique.

Dijo claramente ¡mmm! Y sus pies, por nada, tocaban su nuca. No se por donde la recibí pero… ¡que verde Ali!.

¡Léemelo! Mientras mas frío, mejor verlo. ¡Graba , graba!.

Al cuadro y su fotografía los vi como a cualquier otro cliente, todos entran aquí de cabeza. ¡Que se voltee la de verde!. Mmmm… ¡pues bueno!.

¡Pásale Ali! Filmo pasos para: “ La bebida me persigue”. Mmmm…. ¡doblado?!.

¡ Cuadrado camina! Bebiendo pucheros, doblando los paso y filmando ilegales.

CUARTO SEGMENTO

Proyección de la siguiente imagen:

CADY NOLAND

STOCKADE (1987-88)

EMPALADO

POLES, STACHIONS, EXIT SINGS, METAL MESH, PAYROLL SHEETS, WALKERS

VALLA, ANDADORES, MALLA, HOJAS DE NOMINA, LETRERO DE SALIDA.

durante 2 minutos como invitación para aplicar el método presentado

Beatriz del Carmen Ruíz Veloz, “La confianza a través del cartel…”

Beatriz del Carmen Ruíz Veloz, “La confianza a través del cartel…”

Hace varios días ya, que había notado en la calle durante el pequeño transcurso de mi casa, hacia otros lugares y así también en el regreso, bastante gente irradiada de ruido, pero no sólo el ruido al hablar, gritar o gesticular algo, sino el propio ruido visual, que bombardea atacando con color, forma, tonos, tamaño, signos distintos, etc. todo lo que en mi ciudad al igual que en otras ya también había encontrado los mismos síntomas.

La gran carga visual o ruido, nos ha llevado a desinteresarnos por una comunicación pacifica, enredando tanto las palabras que a veces se pierde por completo el contexto si uno mismo no se acopla a las circunstancias.

Sin embargo a medida de estos cambios también la sociedad se tiene que adaptar rápidamente y a veces es tan apresurada esta evolución, que no nos percatamos de cómo esta ocurriendo.

Tal como me ocurrió a mí al mirar estas imágenes por primera vez, pues pueden parecer comunes y corrientes comparadas con otras que tienen la misma forma, no culpo el porque no nos detenemos a revisar sigilosamente cada oración en cada aviso o cada cartel que vemos; entiendo que la propia gente de cada ciudad va de prisa cada segundo e irremediablemente evade ese ruido que satura más a la masa.

Pienso que de alguna manera se vuelve cada vez más difícil para los diseñadores, publicistas o mercadólogos por ejemplo, o quizá algo no tan comercial quizá hasta para quienes sólo quieren emitir alguna información, la contaminación visual es grandísima que a veces este tipo de anuncios no sobresale. Quizá se vuelve algo triste pero no imposible.

Sobretodo que existe el ingenio de las personas que económicamente no se defienden, pero si creativamente en el uso de las palabras, que hasta determinado punto se vuelven amenas con el público y se pierde la formalidad ética que fue indispensable para nuestros padres.

Encontrando pues este tipo de material (para mi estudio visual); creo que no es tan triste el abandono y desinterés en los carteles o medios publicitarios; puesto que hasta cierto punto tanto quien transmite ese mensaje, no sólo busca llamar la atención o rebasar el limite de visión con varios elementos gráficos, sino que usa un contexto personalizado y además directamente familiar para alcanzar su objetivo, que es alentado o desanimado en el momento de esa lectura.

En mi diverso paseo por mi y las ciudades me propuse ser más analítica y conseguir que transmitieran ese sentido; así pues encontré demasiadas imágenes por supuesto, aunque no fue fácil, escogí las más representativas y me pude dar cuenta que es interesante en cuanto a su composición ingeniosa para acercarte y sin estar tan dirigido a mí puesto que yo no lo buscaba en ese momento, por lo menos se especula el agrado o desagrado que entra con tanta fuerza hasta pensar que es alguien conocido al que puedes entregar esa confianza.

Es tanto el modo de confiabilidad que parece ser que un cartel es un amigo y puedes sentirte acompañado, quizá se borre la idea de ser tan individualista e importe más una unión social estrecha y compartida.

Yessica Yazmín Hernández López El cine, televisión y video arte

Yessica Yazmín Hernández López

Estudios Visuales

El cine, televisión y video arte

Dentro del contexto general de las artes nos encontramos con una gran constante: el arte siempre ha tenido un panorama evolutivo dentro de un contexto social determinando por el espacio-tiempo. La escultura, la pintura, el grabado son algunos de los medios artísticos favoritos por grandes periodos de tiempo en la historia y todos ellos nacieron dentro de un contexto “artesanal” para posteriormente convertirse en arte mayores. Pero a partir del siglo XIX nos encontramos con nuevas fuentes de creación y reproducción de imágenes que resultan en meros medios de entretenimiento del público y consolidan una mayor posibilidad de lucro dentro de las masas, hablamos de la fotografía, el cine y la televisión. Sin embargo el rápido crecimiento de la fotografía como intermediario técnico en distintos ambientes de creación le permitió entrar en el mundo del arte de una manera más acelerada que el cine y la televisión.

El segundo de ellos (la televisión), es desde su comercialización uno de los medios de comunicación masiva por excelencia; aunque en los últimos años comparte la lista con el internet. Este medio ha sido sacralizado por todo aquel que cuentan con uno dentro de su casa: “un objeto indispensable en todo hogar”, además del refrigerador, claro esta. Consiste en un vicio y adicción para matar el tiempo para mucho y para otros una maquina chupa cerebros. Aunque existe muchos intentos para insertar dentro de ella el término artístico.

El cine se encuentra en un parámetro existencial más o menos parecido al de la televisión, con la única diferencia de que cuenta con varias ramificaciones, y unas de ellas es el cine de arte y el video arte. El primero diferenciado del cine comercial por una mayor libertad creativa; durante los años 30’s , los primeros indicios de cine de arte vienen de aquellos que buscan la innovación añadiendo estética, tales como: Sergei Eisenstein. Además de algunas intervenciones de artistas surreales como Luis Buñuel y Salvador Dalí, Dadaista como: Man Ray, Marcel Duchamp. En los Estados Unidos se dio por trabajos de Orson Welles.

La imagen visual producto del ente creador publicitario esta cargada de un mensaje lingüístico1, un signo inventado y construido con el propósito de anclar y revelar un mensaje o un conjunto de mensajes con un fin determinado; se realiza la construcción de un sistema de signos develado al vidente a través del significado, o significados de entre los cuales puede elegir algunos e ignorar otros; y el significante, derivado de su propia construcción.

Éste mensaje (el mensaje lingüístico) tiene un apoyo fundamental dentro de la palabra y el texto que lo acompaña, una relación entre la figura y el discurso que convierte la imagen visual en una imagen literal, basada en la énfasis del mensaje. La palabra hace del mensaje algo más directo o parcialmente directo. Por lo cual en la mayoría de los discursos televisivos y cineastas se cuenta con un guión, titulo y/o leyenda que denotan el contenido simbólico, y la diégesis (el desarrollo narrativo de los hechos) es el medio habitual para lograr lo anterior. Un mensaje privativo.

Según Roland Barthes estas imágenes contienen mensajes sin códigos, su existencia radica en ser una copia análoga de la realidad “un mensaje suplementario” el cual llama estilo de la reproducción ya que se trata de un significante con cierta imagen del creador y cuyo significado remite a una cierta imagen que recibe de la sociedad que recibe el mensaje. Se trata de dos mensajes uno denotado que es el análogo y el connotado que es la manera en como la sociedad hace leer lo que piensa.

Esta situación es la que provocaba a algunos artistas el llevar a cabo lo que ellos creían un acto de profunda crítica social dirigida específicamente a la dominación de grupos e individuos; parte de ello derivo en el video arte, éste se apego más a los años 60’s y 70’s . Las diferencia entre el cine y el video arte, es que este último no necesariamente cumple con las convencionalidades del cine, tales como emplear actores o diálogo, y a veces carece de una narración o guión.

Sin embargo antes de adentrarme directamente en el desarrollo del video arte de los 60’s y su apogeo, comenzaré por establecer como se introduce el video en el ambiente artístico. A finales de los años 40’s Jackson Pollock introduce un planteamiento perfomativo captado por la cámara, en donde los comunes movimientos en los que él acostumbra a pintar sus cuadros de gran formato se convierten en probables sutiles movimientos de baile; uno de los primeros videos en documentar una acción artística. Para este momento dentro del mundo del cine estadounidense ya existen grandes compañías de filmación internacionales como La Warner Bros., Universal Picture, Fox film Corporation (20th Century Fox), Metro Goldwyn Mayer, etc., y el sonido ya es parte de las películas, el espectador ya esta acostumbrado a la imagen en movimiento y el material para ello es un porco más accesible. Con esta intervención fílmica en la obra de Pollock, el video (junto con la fotografía) se convertirá en una plataforma técnica a las que más se recurre para la documentación dentro del arte conceptual, el body art y el arte de acción como el happening y el performance. En este contexto cabe mencionar el caso de Yves Klien y sus antropometrías (pinturas corporales) en relación directa con la producción del video de Pollock; en ambos casos la obra pictórica cuenta con un apoyo performativo y video documental.

Otro movimiento que se vale del video como medio documental es el “Accionismo vienes”, dentro de él se pone énfasis creativo en prácticas corporales expresionistas, provocativas, transgresoras y fetichistas que buscaban su justificación en las teorías psicoanalíticas de S. Freud, C. Jung y W. Reich, y liderado por el trabajo de artistas austriacos como Egon Schiele, Oskar Kokoschka, Hermann Nitsch, Günter Bruss, Otto Muehl y Rudolf Schwarzkogler.

En 1962 en Wiesbaden tuvo lugar los festivales de música moderna Fluxus Festspiele Neuester Musik considerado el acto iniciador de la comunidad del Fluxus, formada por Wolf Vostell, Nam June Paik, Dick Higgins y George Maciunas. En este apartado sólo nos dedicaremos a los dos primeros. Wolf Vostell fue el que incluyó por primera vez un televisor en funcionamiento en la pieza “La mirada Alemana” en 1958; mientras que Paik fue el primer artista al que se le ocurrió grabar una cinta de video y mostrarla en público como un hecho artístico.

Ahora bien, continuando con la idea de manifestar el descontento hacia los medios masivos de comunicación: uno de los medios más habituales para mostrar tal situación fue la crítica contra la televisión y las violentas acciones en contra del aparato. Las primeras manifestaciones de ello fue mediante el happening realizado por Wolf Vostell, en 1963 en el Yam Festival, envolvió un televisor en alambres de espino y “lo enterró vivo" mientras continuaba emitiendo su programación. En septiembre de ese mismo año, condujo al público de la galería Parnass de Wuppertal (Alemania) a una cantera donde podía verse a lo lejos una televisión en funcionamiento, cogió un fusil, y la destruyó de un disparo; considerado el primer fusilamiento del medio.

Por su parte Paik demostró un principio con cierta agresividad, ya que comenzó rompiendo pianos para posteriormente romper televisores. Más tarde comienza a crear objetos utilizándolos: realiza esculturas con televisores como materia prima. Sin embargo no por ello deja la crítica al medio. Se considera que en sus obras existen dos rasgos fundamentales: la curiosidad y el sentido del humor. Mientras Vostell tenía un compromiso radical con el discurso, ya que se centra en el objeto y en lo que este representa, el aparato como parte de un repertorio de materiales; Paik concebía la parte lúdica del arte, pues no lo destruye más sino que lo ridiculiza (un poco de lo que hizo Andy Warhol con el cine, al comprar su cámara y crear películas en las cuales solo se ve a alguien durmiendo, lavándose los dientes, etc). La finalidad de Paik era la de regenerar tal aparato, transformarlo “reciclar las imágenes que esta emite para ofrecer otras versiones más creativas y realizar obras donde resulte imprescindible la participación del espectador. Crear otra TV, según Laura Baigorri.

El video arte como registro de obras en el happening o el performance presenta un debate sobre las consideraciones como obra del registro y la pieza en tiempo y espacio. Parte de este conflicto es el que nos encontramos con la obra de Bruce Nauman, artista estadounidense del cual se reconoce su amplia producción artística dentro de múltiples medios técnicos de creación como la escultura, fotografía, dibujo y performance, además del video que utiliza de tan variadas formas mediáticas de expresión, es decir, ya se como documentación de una pieza perfoncera, el video como parte de una instalación, o el video como obra de arte en sí misma.

Su trabajo con el video lo coloca como un pionero del video arte y la mayoría de las sinopsis de sus obras son orientadas a aquellas que contenían alguna grabación incluida. En él se presenta el caso del uso del video como medio documentalista de un performance. Con Nauman existe un ensalce del video documental como video arte (a diferencia de los artistas del accionismo vienes); debo decir que (a mi parecer) las consideraciones de ello es debido a la naturaleza misma del video; es decir, en la mayoría de los video documentales de una obra en proceso existía un público espectador y la cámara, en los video de Nauman sólo es la cámara y (tal vez) el camarógrafo. El performance valía como tal a partir del acto y la interacción del espectador, con Nauma esta interacción se niega y sólo existe el video como tal para dar relevancia al acto; entonces, ¿qué es más importante el acto o el video?

Dar respuesta a esto no es tan sencillo pues es evidente que la acción es importante por si misma, en ella radica el concepto y el resto de la producción, sin ella no había producción fílmica que tratar. Sin embargo el video es prueba fiel de tal acción y único soporte conocido para catalogar la obra (no existe espectadores u objetos resultantes como sucede con Jackson Pollock e Yves Klein); lo cual nos deja con el único camino de manifestar la importancia equivalente de ambos.

Las instalaciones de video, video esculturas, video ambiente y video creación no existe cabida para manifestar tal confusión de conceptos, el artista es claro y el fin cumplido, el video funciona como parte de un todo con el cual el discurso es completo (acompañado a veces con audio) y absoluto, la interpretación es múltiple pero el fin sensorial cumplido (también representados por Bruce Nauman, Dan Graham, Bill Viola, etc). Tampoco se puede omitir el otro lado de la moneda, en el cual el artista se aprovecha del medio no sólo para crear un dialogo artístico sino introducirse dentro de lo comercial, tal es el caso de Peter Greenaway cuya principal formación de artista fue un intermedio, para convertirse posteriormente en cineasta y en cuyas películas (como The pillow book) da a conocer parte de su formación.

La lista de creadores dentro del video arte es considerablemente larga, sobre todo en los últimos años, en los cuales el aprovechamiento técnico y la baja de precios en productos comerciales a partir de la devaluación de esto en relación directa a la innovación posibilita la adquisición y uso con el pretexto de la creación plástica en colectivo o individual. Además de las múltiples convocatorias internacionales y/o nacionales que promueven este medio de expresión.

A finales de los años sesenta y en los años 70’s (en los cuales artistas anteriormente mencionados siguen produciendo) la industria del consumo del cine ya no sólo se limita a las salas o el televisor, se dan a conocer nuevas manera de comercialidad y el video digital entra en contacto directo con el público. La utilización de este medio era prácticamente inevitable. La producción artística es en relación directa a los avances dentro de la ciencia y la tecnología (inevitablemente) y en consecuencia de los requisitos sociales y personales hacia la misma. De la misma manera se dio la consecutiva utilización de sistemas operativos implementados en la cinematografía.

Este medio de creación es tan dependiente de la ciencia y la tecnología (y de alguna manera de las innovaciones que se den en la industria del cine) como ningún otro medio artístico y de ello deriva su continuo cambio, por lo tanto debe entenderse que la introducción de este medio al ámbito artístico fue gradual; su reconocimiento como arte en sí mismo necesito pasar por un proceso largo encontrándose al principio con la misma función que cumplió la cámara en su momento (auxiliar de las artes mayores) y que sin embargo resulto ser de gran importancia debido a las necesidades de las nuevas tendencias y movimientos (registro) como el land art y el performance, así como el happening, o la documentación que se da como en el caso de Jackson Pollock.

Para un público aburrido del arte tradicionalista y con hambre de entretenimiento novedoso (el público de masas consumista) le resultó interesante el mezclar el arte con parte de la vida cotidiana. Se fabrica un hibrido capaz de entremezclar la información con la diversión, la documentación con la ficción, y un sin numero de posibilidades que se acrecientan. Sin embargo, ello no estipula que todos los medios restantes se extingan, o estén en proceso de extinción; muchos de los artistas que utilizaron el video arte no dejar de producir en otros medios.

En los años 80’s (después de todo una largo periodo de video documental) se da un cambio, ya no se reproduce la escena a modo de simple documental, sino que, a partir del surgimiento del apoyo técnico por medio de programas de informática, la cámara se convierte en un aprovechamiento para contar narraciones y ficciones complejas; la llamada estética del clip hace presencia en el video arte con la aparición de MTV. Dos de los artistas en representar este momento son Gary Hill y Bill Viola.

En los años 90’s los artistas siguen aprovechándose del equipamiento técnico, lo cual hace que se considere superflua tanto el trabajo como su clasificación y el artista; es decir, ¿ahora que tanta diferencia existía entre el formato del cine y el cine de arte, pues ya no sólo compartían los procesos y medios técnicos sino que también ambos contaban con una narrativa lineal que encuentra en los 80’s sus inicios? Por ello a principio de los 90’s se considera que el concepto de video artista dejó de existir. Para remediarlo, algunos artistas buscan un estatus de original, en donde crean videos (video instalaciones, video esculturas, video ambientes, etc.) en ediciones limitadas o únicas, creando una exclusividad artística que aumenta el valor de la obra con un contexto real surgido de la cultura circundante.

Este formato de narración lineal de la realidad tiene una respuesta en contra defendido por artistas con un enfoque de estilo documental cercano a la realidad, basada en una tradición marcada por el cine experimental, por estudios socio-históricos del cine, con modificaciones de la estructura temporal, corte y ajuste, así como empleos de sonido, lenguaje y texto. Grabaciones del sí mismo y del día a día.

Ahora la línea de trabajo no dista mucho de los últimos veinte años, una dualidad creativa que sigue siendo acompañado por una prolífica labor de muchos artistas internacionales. La técnica y la herramienta siguen incluyéndose con cada evolución de las mismas, y aunque la inmersión de sistemas operativos usados en los medios comerciales se vuelvan cada vez más utilizados dentro de los medios artísticos, no se puede hablar de un retroceso en este arte o nueva decadensia, como se pensaba en los 90’s. La definición del video arte no se deduce a partir de las herramientas que utilice ni la estructura narrativa, sino cómo a partir de estos, el artista logra una integración estructural coherente y consigue que la obra sea artísticamente reconocida y no comercialmente comprada (integrado a la intención del mismo).

No se trata de definir lo que es video arte y lo que no lo es en trabajo de artistas contemporaneos a partir de los medios que se utilizan, sino por como se utilizan; ya que si bien en un principio el punto era llamar la atención del espectador hacia el arte y la integración de este con el mundo cotidiano los medios para lograrlo van a venir del día a día sin importar su precisa procedencia.

Se podría decir que como artistita la premisa seria que “para vender, hay que venderse”, que si bien se puede tomar como cierto, esto no lo es en su totalidad (aún contamos con cierta libertad de creación). Consideremos el hecho de que tal vez no necesariamente el creador se vende a las masas (que si bien son importantes pues de ellas parte el producto, finalmente no son las consumidoras fundamentales dentro del sistema), este debería venderse a quien es el/los principales consumidores (museos, galerías, coleccionistas). La “economía” dicta que hay un producto final que es el que tiene un valor, y este lo determina el cliente, que a su vez dicta que se hace. El cliente en cuestión compra lo que corresponde a sus intereses personales que, una vez más, son surgidos del mundo de masas donde se crio.

La inclusión del video como medio artístico abrió una vez más una íntima relación con el espectador, acercándolo a partir de los temas comunes, controversiales y en ocasiones transgresores; hablar de evolución implica manifestar un progreso comprobado positivo de lo que se esta hablando (un desarrollo general positivo de todos los implicados dentro del mismo tema, no sólo el video, sino también otros medios artísticos) por lo tanto no considero que el arte haya evolucionado a partir de su utilización, en todo caso se hablaría de un pequeño progreso estructural o del agregado de una nueva área o línea de creación pero no una evolución artística definitiva.